Pídanle a los Reyes un mp3, pero no una p2p
La noticia del día, en lo que a “nuevas tecnologías” se refiere es el incremento en un 30% en la compra de dispositivos de reproducción y comunicación pública de música en formato mp3 (aparatitos que también sirven – lo sabemos – para archivar documentos, fotografías…etc). En TVE los definían como reproductores “de la música que se baja de Internet”.
A ver si nos centramos.
nos “amenazan” con las penas del infierno ,pero ponen a nuestra disposición unas “maquinitas” cuyo principal objetivo es la audición de música bajada de Internet.
Tres preguntas:
1ª.- Se informa al consumidor/usuario de qué música es “lícito” descargarse de Internet? de no ser así los fabricantes de reproductores mp3 podrían – quizás, presuntamente – estar incitando a la comisión de un delito?
2ª.- Si mi disco de Estopa (y fíjense que hablo del CD que he pagado, ni siquiera del CD de un amigo) viene con una protección anticopia y yo quiero escucharlo en mi divino-de-la-muerte recién adquirido reproductor mp3, cometo un delito por utilizar un programa informático (de los muchos que existen en el mercado) y transformar la música en formato CD a formato mp3?
3ª.- Prosperaría una denuncia presentada por SONY (por ejemplo) a sus usuarios de reproductores mp3 por cometer – presuntamente – un delito contra la propiedad intelectual de obras protegidas de su discográfica?
¿De verdad te has comprado un disco de Estopa? Jajaja.
oye, que he dicho «estopa», no «el fari»!.Además, si el ejemplo lo pongo con «Tannhäuser» debería adentrarme en otras consideraciones como derechos de autor sobre fallecidos y bla, bla, bla…
Bueno. El ejemplo con fallecidos es bastante interesante cuando se habla de Walt Disney 😉
touché!