Me he enterado por Mariano…Pixel y Dixel… y también lo cuentan al otro lado del charco.

Supongo que,

a estas alturas de la película, de poco sirve hablar de la diferencia entre propiedad industrial (patentes) y derechos de autor… y de la insustancialidad de invocar patentes sobre programas de ordenador allende los dominios del Imperio…

a estas alturas de la película, parece una pérdida de tiempo repetir que una cosa son los derechos de autor sobre un programa de ordenador y otra cosa son los derechos de autor sobre una creación artística realizada a partir de un programa de ordenador…

a estas alturas de la película lo politicamente correcto es «aceptar barco como animal de compañía» y tragarnos el sapo de que los GIFS son de dominio público…

pués nada… enhorabuena a los premiados!, que dirían los gomaespuma.