La ventaja de reflexionar cuando ya lo han hecho casi todos los asistentes a la presentación de «Blogs» es la perspectiva.

Quizás no somos conscientes de la importancia histórica de un libro sobre las bitácoras; «fotografía de un momento concreto de la blogosfera», como lo definieron Julio Alonso y Octavio Rojas ; casi lo de menos es el contenido (aunque quien lea con cierta asiduidad a sus autores sabe que es imposible que sea malo).

A la importancia histórica (quizás hoy suene rimbombante…pero ya me lo contarán vds. dentro de unos años 😉 ) de un libro sobre la «blogocosa» se sumó la presencia del «alcaldable» por el PP (muy modoso en todo el acto) en cuyo blog (¿corporativo?) ya se glosa – desde primeras horas de la mañana – el acto de ayer. Que los políticos se acerquen a estos «saraos» es buen síntoma de la predisposición a la «conversación»; aunque – llamenme raro – me gusta más la frescura de Orlando Suarez; no se…se me antoja «más metido en el medio» .

Con lo que me quedo, sin embargo, es con la sensación de que ayer tarde en el Palafox hubo un «post» (suerte que el Dr. Tramullas no me lee) y muchos, muchos, muchos comentarios y apostillas.
Como pasa en las bitácoras que permiten comentarios cada cual dijo lo que vino en gana, y ya hay quien ha dado respuesta a algunas respuestas que quedaron sin contestar:

«Utilizar la herramienta de publicación para colaborar, dialogar o compartir un espacio con otra gente es otra vuelta de tuerca a este mundillo de los blogs.

Así, los hay de dudas y respuestas , los hay con , los hay sin … los hay familiares .»

También lo cuentan en La blogosfera española se enlaza en Zaragoza ( El Periódico de Aragón – 02/02/2006 ), que recoge una frase lapidaria del moderador:

«las bitácoras no son un medio de comunicación, sino un medio de comunicarse»

No recuerdo los weblogs de todos los que estaban ayer, que fueron muchos para una ciudad de provincias, pero pocos, muy pocos, de la «mañogosfera». Me quedo, como resumen, con las palabras de Fernando Tricas:

«Yo diría que la conversación fluyó y se pudo hablar de bastantes cosas. Fue una pena que Julio y Octavio no se pudieran quedar un ratito mas para charlar después y que no hubiera patatas fritas ni nada de eso, pero al final creo que mereció la pena. También fue una pena que Juan Varela no pudiera acudir.»

Y ya que el post (disculpe Dr. Tramullas) va de blogosfera; y ayer se habló de enlazar y desenlazar (y el desenlazador que me desenlace buen desenlazador será) no me parece ocioso recordar que los contenidos de esta bitácora se pueden – que también son ganas 😛 – reproducir, distribuir, comunicar, calcar, photokopiar…etc. – sin perjuicio del derecho de cita que por sabido se calla – previa aceptación del contrato de cesión de derechos que aparece en el marco de la derecha…respetando los derechos morales, entre los que «en apañó» se encuentra el derecho a la integridad 😉